Aprueban por unanimidad nueva Ley Orgánica del Poder Judicial

Chihuahua.- En sesión extraordinaria, el Congreso del Estado aprobó por unanimidad la nueva Ley Orgánica del Poder Judicial de Chihuahua. El dictamen fue respaldado por las y los 32 legisladores presentes.

La iniciativa tiene como eje central el fortalecimiento de la independencia judicial y la preservación del equilibrio entre los órganos que conforman al Poder Judicial. Está sustentada en los principios de autonomía e independencia judicial previstos en los artículos 17 y 116 de la Constitución Federal, que garantizan tanto la independencia funcional de los órganos jurisdiccionales como la autonomía presupuestaria de la institución.

En el marco de la Constitución local, se establece un sistema de colaboración orgánica entre el Tribunal Superior de Justicia, el Órgano de Administración Judicial y el Tribunal de Disciplina Judicial. Esta coordinación, precisa el proyecto, no implica subordinación jerárquica: el Tribunal Superior conserva la rectoría institucional (artículo 100), el Órgano de Administración ejerce autonomía técnica y de gestión en materias específicas (artículo 109) y el Tribunal de Disciplina mantiene independencia plena en la función jurisdiccional disciplinaria (artículo 107).

El nuevo marco legal dispone que la función judicial se rija bajo principios de independencia, imparcialidad, eficiencia, legalidad, respeto a los derechos humanos, profesionalismo, honestidad, celeridad, transparencia y perspectiva de género.

En lo relativo a la organización territorial, los Distritos Judiciales conservarán su distribución vigente. La estructura del Poder Judicial se ajustará de la siguiente forma: el Tribunal Superior de Justicia estará integrado por el Pleno, la Presidencia, las Salas y la Secretaría General; los tribunales de primera instancia, laborales y menores; el Tribunal de Disciplina contará con Pleno, Presidencia, Secretaría General de Acuerdos, Comisiones y Salas; mientras que el Órgano de Administración Judicial se conformará por Pleno, Presidencia, Ponencias y Secretaría Ejecutiva.

Además, se reasignan las áreas auxiliares del Poder Judicial a los tres órganos, conforme a sus competencias. La adscripción de las áreas administrativas a la Presidencia del Tribunal Superior busca garantizar decisiones con una visión institucional integral, en coordinación con los órganos jurisdiccionales responsables de la impartición de justicia.