Delicias

El mismo Delicias

  • Por editor M

Por Carlos Gallegos: 

Usted y yo llevamos tres domingos estacionados en los años 40s del siglo pasado, cuando  Delicias estaba en su segunda década de vida.

Vamos por el cuarto, haciendo bueno aquello de que recordar es volver a vivir.

Fue una década muy productiva, de gran actividad, en que tanto autoridades como sociedad civil echaban los cimientos de lo que llegaría ha ser, de lo que es nuestra patria chica.

Había mucha y muy rentable siembra de algodón, con Estados Unidos como el  gran mercado, preparándose para intervenir en la Segunda Guerra Mundial, lo que generaría grandes pedidos de oro blanco para la confección de tantos uniformes para tantos millones de soldados que irían a morir a Europa, al Pacífico, a los campos de batalla de Africa.

En 1942 y 1943 surgieron Bodegas de Delicias y Vinícola Delicias, donde se convertían en vino fuerte y generoso las grandes cosechas de uva que se producían en los fértiles llanos del Distrito de Riego 05.

En tanto el campo producía, el evolutivo pueblo se equipaba hacia el futuro.

Un feliz día de 1944 este grupo de activos vecinos se retrató ante la obra que levantaba el edificio de la Sociedad Mutualista Miguel Ahumada, bautizado con el nombre del político colimote que fue uno de los gobernadores de Chihuahua antes del estallido de la Revolución Mexicana.

Identifique a Fidel Torres, Aurelio Quintana,Juan García,Rodolfo Pimentel, Román Monares, Jesús Candia, Faustino Cardiel, Manuel Doporto, Reyes y Juan Baeza Morales, Manuel González Espino, Francisco Osollo Acosta, Luis Castilla, Francisco Osollo Torres, Néstor Escobedo y José Jiménez.

Nombres de hombres que quedaron en las páginas de nuestra historia guardados para usted en la colección Osollo Soto.

En la otra foto, igual del 44, coleccionada por la familia Fierro Bektrán, el sol poniente se refleja en el Mercado Municipal, hoy Mercado Juárez. 

La clientela llegaba en carromatos de tracción animal, a pie, en un camión urbano que venía traqueteando desde el barrio del Puentecito y también en apantallantes automóviles que no tenían que pagar estacionamento.

A más de 70 años, en plenos festejos de la fundación, aquel Delicias es el mismo Delicias de hoy, si acaso, y con dispensa de nuestros antepasados, un tanto, un mucho más bonito.