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Extorsiona Fiscal de NCG a nogalero con dinero, carne y... ¡hasta barbacoa!

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Extorsiona Fiscal de NCG a nogalero con dinero, carne y... ¡hasta barbacoa!

Chihuahua.– Una denuncia formal ante Asuntos Internos de la Fiscalía General del Estado (FGE) fue interpuesta contra el Fiscal de la Zona Noroeste, Alejandro Vargas Salas, señalado como presunto líder de una red de extorsión que opera con el amparo de la propia institución.

La querella fue presentada por Luis Arturo González Durán y su hija Yasmin Alejandra González Valverde, quienes aseguran haber sido víctimas de cobros ilegales relacionados con un viejo litigio agrario.

Según el expediente de investigación con folio “37-2025-0003519”, Vargas Salas y varios de sus subordinados habrían exigido pagos en efectivo, transferencias bancarias y hasta parte de las cosechas familiares a cambio de “protección”.

La denuncia incluye testimonios sobre el comandante Díaz que visitaba sus negocios para exigir carne y otros servicios en nombre de la Fiscalía, así como encuentros directos con el propio Fiscal, quien habría recibido dinero en mano.

En la denuncia también se involucra al abogado de la familia, Alberto Ávalos Renova, señalado como cómplice de Vargas Salas. Los afectados relatan que, tras años de relación profesional y personal, el abogado los presionó para entregar montos que van de los 6 mil a los 100 mil pesos, bajo amenazas de acciones legales si no cooperaban. La situación los llevó a cerrar su negocio, cambiar de domicilio y buscar justicia en Ciudad Juárez.

El caso se encuentra en proceso de investigación y ya existen evidencias, como registros de depósitos y llamadas telefónicas.

Trascendió que no es la única denuncia contra Vargas Salas, quien contaría con el respaldo de Jorge Flores Carrete, Fiscal Especializado en Control, Análisis y Evaluación, instancia encargada precisamente de recibir quejas contra funcionarios.

 
 

Se acusa a Flores Carrete de proteger a Vargas por su cercanía personal y profesional.

A continuación el documento narrando los hechos: 

 

Y el texto: 

"Denuncia en contra del Fiscal de la Zona Noroeste, Alejandro Vargas Salas, como el supuesto líder de una poderosa red de extorsionadores al amparo de la placa de la Fiscalía General del Estado (FGE), aprovechando un viejo litigio en el que se hallaba el huerto de las víctimas.

Mediante la denuncia del Caso Único “37-2025-0003519”, Luis Arturo González Durán y su hija Yasmi Alejandra González Valverde expusieron documentación ante Asuntos Internos de la FGE en Ciudad Juárez, donde se dicen hartos de las extorsiones de Alejandro Salas y sus subordinados, para estarlos despojando continuamente de fuertes cantidades de dinero.

Contando con la complicidad de quien era abogado de la familia, Alberto Ávalos Renova, el Fiscal de la Zona Noroeste le ha sacado a la familia de nogaleros dinero durante seis ocasiones, empezando con 6 mil pesos, hasta que Alejandro Vargas Salas, apoyado por sus subordinados en las oficinas de Nuevo Casas Grandes, les pidieron a la familia 100,000 pesos y el 35 por ciento de sus cosechas para “protegerlos”.

Con esta supuesta red de extorsionadores con placa de la Fiscalía, las víctimas dijeron que un “Comandante de apellido Díaz” pasaba seguido por el negocio familiar en Ricardo Flores Magón, seccional de Buenaventura, donde tienen una carnicería denominada “Nena” y adjunto una taquería, para llevarse a veces 5 kilos o 10 kilos de carne “como cortesía” por su protección.

Incluso, el dueño del negocio dijo que una vez le pidieron hacerles hasta barbacoa porque la necesitaban “para una fiesta del Fiscal, de su Comandante y de la Coordinadora”, lo que señaló con pesar, que resultaba en un quebranto a su negocio y a la economía propia de la familia.

Por un litigio empezó la pesadilla de extorsiones
La familia González Valverde se encontraba feliz por la resolución donde al jerarca se resolvió el juicio a su favor por un predio de 14 hectáreas cerca de la presa Las Lajas, sin saber que en julio de 2023 comenzaría la pesadilla justo cuando tenían planes de comenzar a producir en el terreno heredado.

La superficie estaba siendo usada anteriormente por un hermano de Luis Arturo González, por lo que al darse la resolución tuvo que salirse y, para evitar conflictos, tuvo que solicitar apoyo de la Fiscalía del Noroeste, ya que trabajadores de su hermano acosaban a sus trabajadores en el huerto.

Para esto, contó con el “apoyo” del abogado de la familia, Alberto Ávalos Renova, con quien llevaba una relación de negocios de varios años en los que incluso, dijo que llegó a comer en casa de sus padres y habían formado una buena “amistad”.

Empero, para comenzar a mover el asunto de su predio, el abogado les pidió una transferencia de 6,000 pesos para “mover unos contactos en la Fiscalía”, para lo que les pasó una tarjeta de Bancomer a nombre de Leonel Hiram Díaz Bustillos, aunque tuvieron problemas para ese depósito.

En respuesta, el abogado de la familia les dijo en esta ocasión que necesitaban la cantidad de 90,000 pesos para “recibir la protección del Fiscal y del Comandante”, de lo contrario, no podrían entrar al predio a cosechar.

Fue el día 25 de noviembre de 2024 cuando el abogado de la familia, acompañado del “Comandante Díaz”, que no existe en las filas de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), sino que es parte del personal de seguridad del Fiscal del Noroeste, se presentaron en la carnicería del dueño, quien le entregó el dinero al supuesto Comandante.

El hombre que tomó el dinero le dijo a González Durán que “en 15 días le avisaba” para que pudieran entrar al predio a la cosecha, pero en lugar de eso, el 5 de diciembre el abogado familiar les dijo que necesitaba otros 50 mil pesos, pero que “ya con eso quedaba todo arreglado”.

Fue tres días después que la familia volvió a sostener un encuentro con “la autoridad”, cerca del puente de Galeana en la carretera de cuota entre Ricardo Flores Magón y Nuevo Casas Grandes, donde la hija del dueño vio por primera vez y cara a cara al Fiscal, Alejandro Vargas Salas.

Dijo que llegaron cerca de las 4:00 de la tarde, el abogado Alberto Ávalos y cuatro vehículos más (tropas) de la Fiscalía, de una de las que bajó el “Comandante Díaz” y de otra el Fiscal, Alejandro Vargas Salas, quien recibió de su mano los 50 mil pesos y le dijo que “ya estaba todo listo”, y se retiraron todos.

Para esto, el abogado familiar, su “amigo”, les dejó otro número de tarjeta a nombre de Gabriel Alberto Luna Ledezma para que depositaran 6 mil pesos.

Empezando el 2025 todo se salió de control
Confiados en que tenían “todo el apoyo de la Fiscalía y la protección de los agentes ministeriales”, la familia solicitó en enero el apoyo del “Comandante Torres”, destacamento en LeBaron, Galeana, para que los apoyara porque los trabajadores del hermano desplazado estaban agrediendo a los actuales trabajadores y no los dejaban cosechar.

Eso fue suficiente para dejar en evidencia el “trato privado con Alejandro Vargas Salas”, por lo que en febrero de 2025, el abogado familiar llamó al propietario para decirle que “los superiores estaban muy molestos”, haciéndole referencia al Fiscal del Noroeste y a la Coordinadora.

Como último amago, Alberto Ávalos Renova le advirtió que si no depositaba la cantidad de 100,000 pesos y garantizaba el 35 por ciento de su cosecha para ellos, no iba a poder hacer nada para que la Fiscalía Anticorrupción lo arrestara por haberse metido a un predio en litigio.

Fue en ese momento que la familia se sintió atemorizada, porque a pesar de que sabían tener documentos legales y la sentencia a favor, el abogado les dijo que ni se les ocurriera presentarse a Nuevo Casas Grandes porque “serían aprehendidos de inmediato”, que quizá ya lo estaban buscando e irían a su casa por ellos, por lo que tuvieron que cambiarse de domicilio y cerrar su negocio.

Viendo que luego de tantos depósitos en garantía a su seguridad, no habían hecho más que alimentar las exigencias del Fiscal del Noroeste, Alejandro Vargas Salas, decidieron acudir a Ciudad Juárez para interponer formal denuncia, misma que está en curso por Asuntos Internos y ya hay varias fojas en investigación, con pruebas de algunos de los depósitos y los registros de las llamadas recibidas de parte de los funcionarios involucrados en esta red de extorsiones.

Trascendió que este no es el único caso que involucra a Alejandro Vargas Salas, quien apoyado de sus allegados en la Fiscalía del Noroeste, solicita fuertes cantidades de dinero a propietarios de grandes predios en disputa, con la promesa de que “va a resolver los casos a su favor”, aunque en realidad él, por ser del orden penal, no tiene ninguna esfera de competencia en esos casos civiles".